Alguna vez te has preguntado si tu empresa tiene finanzas sanas, esto al parecer es algo que seguramente no habías pensado, sin embargo la realidad es que como empresario siempre debes de poner mucha atención en todo lo relacionado a tu empresa, principalmente en el área financiera.
La mayoría de las personas que cuentan con una empresa propia tienen la idea de que al tener muchas ventas, bastantes ingresos y un buen flujo de efectivo significa que en cuestión financiera están excelente, pero la realidad es que la mayoría de las veces están en lo incorrecto pues tener finanzas sanas no significa que tengas dinero.
Tres de las principales situaciones que suceden cuando no tienes finanzas sanas son las siguientes:
- Finanzas combinadas: esto sucede cuando tú como dueño de una empresa mezclas tus finanzas personales con las de la empresa. Un claro ejemplo sería que vas a comer con algún familiar y después a tomar un café a una cita con un cliente y esos gastos los cubres con el dinero de tu empresa, cuando lo ideal sería que solo cubrieras la cita con el cliente.
- Cálculo de impuestos: no conozco a nadie que le guste este tema, sin embargo es importantes que contrates a una empresa que te desarrolle una estrategia fiscal y que te mantengas informado de cómo va tu flujo impositivo y qué estás acumulando para la declaración anual. Estamos muy acostumbrados a no querer entender de impuestos, cuando es crucial para la liquidez del negocio.
- Artículos deducibles: cuando no cuentas con una lista de cosas que puedes deducir como gasolina, viajes, transporte, etcétera. Recuerda que de acuerdo a tu giro de negocio, aplican algunos gastos, a veces hay más cosas que podemos deducir de las que estamos enterados. Aprovecha la ley a tu favor e infórmate.
