Las “formas de intercambio de información visual incrementan el interés de los receptores en un 89% y, por tanto, se trata de una herramienta de vital importancia a la hora de comunicar ideas de una forma mucho más sencilla.” Baquía

En este artículo podrás tener una mejor noción de lo que hay detrás del diseño y las cosas que conlleva el diseñar.

Para comenzar a diseñar debes tener conocimiento de lo que realizarás, así como a quien va dirigido y el impacto que quieres difundir con tu diseño.

Antes que nada, debes contar con los materiales necesarios que requiere el proyecto (imágenes, fotografías, ilustraciones, textos, etc.), para esto tendrás que solicitarlo con anticipación al líder del proyecto o cliente, en ocasiones tenemos que buscar parte del material por nuestra cuenta, en este caso necesitamos poner en marcha todo nuestro conocimiento sobre sitios para encontrar los recursos de manera rápida y efectiva.

Ya que se tiene todo lo necesario es hora de iniciar con el proceso de diseño:

1. Bocetaje: aquí podemos dimensionar el alcance de la información que recabamos, el objetivo y mensaje a proyectar.
2. Manos a la obra: Una vez autorizado el boceto pasamos a la pantalla, montamos imágenes, acomodamos información, seleccionamos tipografía, generamos una paleta de colores, y formas que darán un aspecto único a nuestra composición, todo lo anterior debe obedecer al brief del proyecto. Te invito a saber un poco más sobre los 5 principios básicos de un buen diseño.
3. Envío previo del diseño: Una vez concluido el arte se envía al líder del proyecto o cliente para su validación y revisión de información.
4. Ajustes: Si se requiere de cambios se realizan y envía nuevamente para su autorización. Con esto podemos dar salida a impresión o publicación digital del proyecto.
5. Seguimiento: Por último, es recomendable estar al pendiente y dar seguimiento del cliente a cualquier requerimiento que tenga sobre el desarrollo.

Detrás de cada diseño hay todo este proceso de creación y es importante valorarlo. Como ya sabemos, la información visual puede llegar a comunicar mucho más que mil palabras; cuidar de este proceso y su calidad debe ser la prioridad tanto de un diseñador como del líder de proyecto.